España se prepara para un salto tecnológico sin precedentes en su red de alta velocidad. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha presentado hoy un ambicioso plan que elevará la velocidad máxima del AVE hasta los 350 kilómetros por hora, una cifra que situará al país al nivel de las infraestructuras ferroviarias más avanzadas del mundo.
El anuncio se ha realizado durante Los Desayunos Informativos de Europa Press, donde Puente ha confirmado que la primera línea en implementar esta mejora será la Madrid–Barcelona, que iniciará en breve los trabajos de renovación necesarios para alcanzar esta nueva velocidad punta. Gracias a esta actualización, el trayecto entre ambas ciudades bajará de las dos horas, mejorando notablemente los tiempos actuales.
Para lograr este incremento, la red incorporará nuevas traviesas aerodinámicas, un elemento diseñado para reducir un 21% la carga aerodinámica generada por el paso del tren y evitar que el balasto se levante a altas velocidades.
Según ha explicado el ministro, estas traviesas permiten aumentar la velocidad operativa sin comprometer la estabilidad, lo que equivaldría, en condiciones actuales, a circular a 370 km/h reales.
Este avance forma parte del plan de inversión de 60.000 millones de euros que el Gobierno desplegará en los próximos cuatro años para modernizar trenes, carreteras, puertos y aeropuertos.
El proyecto incluye dos grandes novedades en el corredor noreste:
- Conexión directa entre Chamartín y Barcelona, evitando el paso por Atocha.
- Una nueva estación de alta velocidad en Parla, que permitirá a los viajeros procedentes de Andalucía conectar hacia Barcelona sin necesidad de entrar a la capital.
Estas actuaciones buscan descongestionar el tráfico ferroviario madrileño y agilizar los intercambios entre comunidades, consolidando a España como referente internacional en movilidad sostenible.
